TECATE. Un grupo de madres y padres buscadores localizaron restos óseos que podrían pertenecer a la migrante colombiana Karen Sofía Siguecia Arroyo, de 21 años.

Según relató su hermana a una televisora de Buenaventura, Colombia, ciudad natal de la joven, el último contacto con su familia fue el pasado 22 de octubre.

El hallazgo ocurrió en un rancho cercano al muro fronterizo, en el poblado de Jacumé, a 26 kilómetros de la carretera Tijuana-Tecate, una zona conocida por cruces irregulares de migrantes.

Junto a los restos óseos, se encontró un bolso negro que contenía un teléfono celular, el pasaporte y una cédula de identificación a nombre de Karen Sofía.

La búsqueda fue realizada por integrantes de la Célula de Búsqueda e Investigación de Desaparición Forzada, el Colectivo Buscando a Kevin y Yahir, la Guardia Nacional, la Sedena y agentes de la Fiscalía General del Estado.

“Después de casi tres horas y media de búsqueda, hallamos restos humanos. También encontramos una mochila y pasaportes a nombre de la joven colombiana que buscamos. Aunque los restos óseos están completos en un 85%, aún no podemos confirmar que correspondan a ella”, explicó Juan Gonzalo Moreno, miembro de la Célula.

Karen Sofía partió de Colombia el 16 de octubre, con destino a Estados Unidos. Su desaparición se reportó el 28 de octubre, cuando otra migrante que viajaba con ella contactó a la familia para informarles de su ausencia y compartir una fotografía donde aparentemente se le veía sin vida.

“La última vez que habló con mi mamá le dijo que iban a emprender el viaje”, contó su hermana.