TIJUANA. – En el corazón del Pasaje Rodríguez de la Zona Centro, René Castillo ha establecido El Grafógrafo, un refugio literario que trasciende la simple venta de libros.

Fundado con la visión de atender las necesidades de los lectores tijuanenses, este espacio se ha convertido en un punto de encuentro para aquellos que buscan fomentar la lectura y transformar su entorno.

«Es un proyecto que está vivo y se transforma a diario, la gente piensa que vendemos libros, pero yo digo que es lo que menos hacemos», afirmó Castillo.

En El Grafógrafo, los libros no solo ocupan estantes; crean un ambiente acogedor donde los visitantes pueden sentirse como en casa, disfrutando de una buena lectura acompañada de un café.

El objetivo de Castillo es atraer tanto a «gente curiosa como a gente aburrida» para cultivar una comunidad de lectores y ciudadanos que valore estos espacios. «No es necesario realizar un consumo económico para disfrutar de la librería. Aquí, lo único que se necesita es invertir tiempo en la lectura», concluyó el coordinador del proyecto.