TIJUANA.- La ciudad se ve afectada por los vientos de Santa Ana, que ayer alcanzaron ráfagas de hasta 80 kilómetros por hora en las zonas altas de la ciudad.

Según pronósticos, esta condición climática persistiría hasta el sábado, con vientos similares.

En las calles, muchas personas recurrieron al uso de cubrebocas como medida de protección ante el polvo levantado por el viento, buscando prevenir enfermedades respiratorias.

La situación también impactó a los comerciantes de alimentos, quienes tomaron precauciones adicionales para proteger sus productos.

Varios optaron por cubrir completamente sus ingredientes con plásticos o aluminio y limitaron la venta a alimentos para llevar.

Abel de la Rosa, un comerciante de tacos, relató cómo la situación afectó sus ventas.

“La gente no sale a las calles con este clima, y no vendo igual que en un día normal. Para proteger la comida, la cubro con aluminio, uso gel antibacterial y solo ofrezco comida para llevar”, compartió.

Protección Civil de Tijuana emitió una serie de recomendaciones para la ciudadanía, entre ellas evitar quemar basura, no arrojar colillas de cigarro, limpiar maleza alrededor de sus viviendas, vigilar el cableado eléctrico y utilizar cubrebocas al salir a la calle.

Con estas medidas, buscan mitigar riesgos y proteger a la población durante el periodo de vientos.