TIJUANA.- La Dirección de Inspección y Verificación Municipal, suspendió una fiesta clandestina que se llevaba a cabo en un salón de eventos al Este de la ciudad, donde se encontraban aproximadamente de 150 a 200 menores de edad.
Tras una denuncia ciudadana recibida, los inspectores se trasladaron al lugar y constataron que los jóvenes presentes no podían demostrar su mayoría de edad.
Además de que los mejores estaban consumiendo bebidas alcohólicas, lo que motivó el desalojo inmediato y la búsqueda de sus padres o tutores para que los recogieran.
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