TIJUANA.- La adicción a las drogas entre adolescentes y jóvenes es un problema de salud y un tema difícil de abordar en el seno familiar debido al tabú que representa para los padres, señala Matilde Barrios, psicóloga especializada en adicciones y prevención en menores.

Barrios, de «Unidos con Esperanza» A.C., advierte que el primer contacto con drogas suele ser el alcohol y la marihuana, influenciado por la legalización de esta última en California.

La especialista recomienda a los padres ganar la confianza de sus hijos y estar atentos a señales de alerta, como el aislamiento social y la violencia.

Resaltó la importancia de superar los prejuicios y abordar las adicciones como una enfermedad, no un vicio, fomentando la comunicación y la vigilancia sobre el comportamiento de los adolescentes.

«Es esencial detectar el problema a tiempo para prevenir daños mayores», concluyó.