TIJUANA.- A Martín Bobadilla Flores le enojó que su mamá le pidiera dejar de consumir drogas y por eso la mató a cuchilladas.

Aunque al hombre, de 55 años de edad, no lo atraparon por el crimen sino por la posesión de varias dosis de droga sintética ‘cristal’.

Su arresto se dio la noche del domingo pasado, luego de que pidió ayuda al 911 una vigilante de la construcción del viaducto de acceso a la nueva Garita de Otay II.

Mientras caminaba por la carretera Bobadilla Flores, se acercó a la empleada y le ofreció drogas.

Policías municipales lo interceptaron y tras una revisión, descubrieron que traía una cajetilla de cigarros, donde guardaba 10 envoltorios con la droga.

Luego descubrieron que el detenido era parecido al individuo señalado como responsable de privar de la vida a su madre, de 70 años de edad, en el interior de su vivienda en el fraccionamiento Palma Real.

Trascendió que el crimen lo cometió porque su madre le reclamó el que se drogara al interior de su hogar.