TIJUANA.- La Fiscalía General de la República (FGR) inspeccionó esta mañana una residencia que servía de bodega para almacenar droga, y de la que un grupo de policías presuntamente robaron estupefacientes, lo que derivó en un ataque a las oficinas de la Fiscalía General de la República (FGR) y el asesinato de tres agentes.

La diligencia judicial fue en la casa número 52 del fraccionamiento Altitud 58, en la que participaron elementos de la Policía Federal, peritos y el propio Delegado de la Fiscalía en Baja California, Victorino Porcayo.

El inmueble tenía sellos de la Fiscalía General del Estado (FGE) por ser la autoridad que la tarde del pasado 18 de noviembre cateó ese inmueble; mismo día en que, de madrugada, atacaron el edificio de la FGR en Tijuana y donde arrestaron a dos hombres.

La diligencia que duró más de tres horas, los peritos tomaron diversas muestras que serán analizadas en sus laboratorios, además de evidencias fotográficas.

Por ese presunto robo, atacaron a un agente ministerial de la Fiscalía General del Estado (FGE) y asesinaron al policía municipal León Bueno Loreto, el 24 de noviembre.

Mientras que el 27 de noviembre privaron de la vida a un agente ministerial que estaba suspendido y el 4 de diciembre emboscaron y mataron a una agente de la policía municipal, luego de que salió de laborar.

Además hay un policía municipal y dos ministeriales en calidad de no localizados, luego de que fueran suspendidos por el robo de droga.