Tijuana, Baja California, 02 de diciembre de 2021.- Cada vez son menos las familias de migrantes que habitan el campamento El Chaparral, en días pasados dos más decidieron regresar a sus lugares de origen en Colima y la Ciudad de México, con apoyo del Ayuntamiento de Tijuana.

La señora Miriam, y nueve familiares más, viajaron a Tijuana a fin de solicitar asilo político en Estados Unidos al ser obligados a dejar su lugar de origen víctimas de la inseguridad que les arrebató a un integrante. Sin embargo, regresaron a Manzanillo, Colima ella y sus tres hijos de 10, 8 y 1 año de edad, el resto esperarán por una respuesta a su petición.

Durante los cuatro meses que estuvieron en esta ciudad fronteriza, permanecieron en el campamento migrante de El chaparral.

“Pues es que ya me enfadé de estar en ese lugar, si es medio complicado y más por los niños, por la niña que no sale de enfermarse, todos gripa, tos, fiebre; estuvimos en un albergue pero no nos gustó, solo duramos un día y de ahí nos fuimos al Chaparral, porque ese lugar, ese albergue estaba peor que El chaparral, en El Chaparral estamos más libres”, señaló la madre migrante.

Mientras tanto, la señora Janeth quien viajó a Tijuana procedente de Morelos, con su esposo y su hijo, solicitaron al gobierno municipal apoyo para regresar a la Ciudad de México, para de ahí viajar a su lugar de procedencia, después de vivir durante seis meses en el campamento migrante de El Chaparral.

“La verdad en el campamento está muy peligroso ahorita, y pues ya mis otros hijos están en Estados Unidos, y no quiero arriesgar a mi hijo más pequeño, de por su corre peligro y lo estoy arriesgando más aquí, mejor me voy, no creo volver a intentar solicitar asilo por el momento”.

Con las siete personas que integran las dos familias que recientemente partieron a sus estados de procedencia, suman 42 connacionales que han sido apoyados por el Ayuntamiento de Tijuana para regresar a sus lugares de origen, de los cuales 35 estaban asentados en el campamento de El Chaparral.

La señora Miriam, y nueve familiares más, viajaron a Tijuana a fin de solicitar asilo político en Estados Unidos al ser obligados a dejar su lugar de origen víctimas de la inseguridad que les arrebató a un integrante. Sin embargo, regresaron a Manzanillo, Colima ella y sus tres hijos de 10, 8 y 1 año de edad, el resto esperarán por una respuesta a su petición.

Durante los cuatro meses que estuvieron en esta ciudad fronteriza, permanecieron en el campamento migrante de El chaparral.

“Pues es que ya me enfadé de estar en ese lugar, si es medio complicado y más por los niños, por la niña que no sale de enfermarse, todos gripa, tos, fiebre; estuvimos en un albergue pero no nos gustó, solo duramos un día y de ahí nos fuimos al Chaparral, porque ese lugar, ese albergue estaba peor que El chaparral, en El Chaparral estamos más libres”, señaló la madre migrante.

Mientras tanto, la señora Janeth quien viajó a Tijuana procedente de Morelos, con su esposo y su hijo, solicitaron al gobierno municipal apoyo para regresar a la Ciudad de México, para de ahí viajar a su lugar de procedencia, después de vivir durante seis meses en el campamento migrante de El Chaparral.

“La verdad en el campamento está muy peligroso ahorita, y pues ya mis otros hijos están en Estados Unidos, y no quiero arriesgar a mi hijo más pequeño, de por su corre peligro y lo estoy arriesgando más aquí, mejor me voy, no creo volver a intentar solicitar asilo por el momento”.

Con las siete personas que integran las dos familias que recientemente partieron a sus estados de procedencia, suman 42 connacionales que han sido apoyados por el Ayuntamiento de Tijuana para regresar a sus lugares de origen, de los cuales 35 estaban asentados en el campamento de El Chaparral.