TIJUANA.- Grata resultó para el gobernador Jaime Bonilla Valdez, la visita de los niños Edwin Jared y Alvaro Enrique a su despacho en su oficina en el Centro de Gobierno en Tijuana.

Estuvieron acompañados de su madre, la señora Rubí Luque.

El primero, contó, «pasó» a tercero de preescolar, mientras que el segundo «va para segundo de primaria».

Además de charlar con los dos niños, el jefe del Ejecutivo del Estado les obsequió equipos de cómputo para apoyarlos en sus estudios, y respondió a las preguntas que hicieron, motivados por las fotografías que están montadas en las paredes de la oficina gubernamental.

Particularmente les llamó la atención una en «blanco y negro» que muestra al hoy gobernante cuando era un niño y tiene junto a él una olla, de la que sacaba frijoles para comer.

Sobre esta inesperada visita, el gobernador Bonilla Valdez comentó: «El ejemplo de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador ha sido siempre escuchar a todos».

«Hoy, Edwin y Álvaro se acercaron a la oficina mientras supervisábamos la vacunación y me comentaron lo bien que iban en la escuela, pero lo difícil que era porque no tenían una computadora para realizar sus tareas», dijo.

Y enseguida añadió: «En base al programa de entrega de computadoras, les entregue un par de laptops para apoyarlos en sus estudios y, aprovechando la visita, me preguntaron por las fotografías que tengo en mi oficina, en especial la mía, donde estaba sentado comiendo frijoles en la casa de ‘La Liber’, colonia donde crecí».