TIJUANA.- Una niña ni se inmutó al ver a una mujer asesinada a balazos, por el contrario come frituras que saca de una bolsa.

Eran las 09:30 horas cuando la mujer recibió disparos en el tórax y espalda en una calle de la colonia La Morita.

Un adulto, que se cree el padre, llevó a su hija a ver lo sucedido en su barrio.

Quién tomó la fotografía evidenció cómo la pequeña está de cunclillas y recargada su espalda en los pies del hombre.

La niña, con toda naturalidad y sin ninguna expresión de pánico se puso a comer papitas.

A un costado del cadáver estaba otro hombre sentado en el cordón de banqueta, observando el cuerpo ensangrentado y cubierto con cubrebocas.

El presunto responsable huyo a bordo de un vehículo color azul, contrario vecinos.