TIJUANA. El gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez comentó que, si hubiera tenido las facultades, hubiera cerrado la frontera en el estado por 15 días como medida de prevención contra el Covid-19.
Esta decisión, solamente puede de ser tomada por el gobierno federal, pero además considera que hubiera perjudicado mucho a la ciudad de Tijuana debido a las personas que trabajan en Estados Unidos.
‘‘Tampoco podemos extrangular completamente el tráfico, en California cerraron los comercios pero no la industria, hay muchos tijuanenses que trabajan en San Diego y viceversa y necesitan cruzar diario’’.
El gobernador asegura que, de haber podido, el cierre de la frontera hubiera contenido más rápido el contagio.